12 abril 2008

Glorioso


ICARO

Ya me rozas del Ícaro la pluma
en su despliegue de alas contra el cielo,
ya se empina la fiera desde el suelo
y echa en el firmamento blanca espuma
como cera que ablanda; ya rezume
con rachas derretidas, doble duelo
de palomas en celo en pleno vuelo,
por tu lengua de fuego y se consume
el cirio en las entrañas de la hoguera;
que el ave que renace en la ceniza
sea polvo humedecido que se riza
en la frondosidad de tu ladera;
ya desplumas al ángel, mete, guarda,
que otro ángel exterminador ta aguarda.