12 noviembre 2011

Nombre de Dios

MENSAJE

Te mandaré el mensaje, aunque me niegues
tres veces. No comprendo que me pidas
que tire la toalla y me despidas
abrasándome a besos. Y me ruegues,
en mis brazos, que salga de tu vida.
La suerte ya está echada. Aquí constato
que el lunes llegará a tu pecho ingrato
la estrategia final de mi partida.
Un café matutino en el Glorioso
antes de penetrar en la oficina.
Me entregarás tus armas, cosa fina
ver tu muralla abierta por mi acoso.
Te tenderé mi mano, por si acaso
tu vida conyugal ronda el ocaso.