Ana Botella, sube al despacho.
Ay, no puedo, que estoy con Cascos.
Zapatero, Zapatero,
arréglame los zapatos
que tienen un agujero
por comprarlos tan baratos.
Ay, no puedo, que estoy con Cascos.
Zapatero, Zapatero,
arréglame los zapatos
que tienen un agujero
por comprarlos tan baratos.