27 noviembre 2012

Marina S.





PILOTO JUBILADO DE SAS


Acudes a la caza al tostadero
con tus Ray-Ban en pos de algún escote,
enhiesto de pasión, de algún lingote
que ofrecerle a tus dotes de guerrero;
desesperadamente el burladero
embistes sin que nadie te lo note,
fláccido envite de setentañero,
y ofreces a tu víctima el cipote
elevado y letal. Con la toalla
de noche en la palestra y la botella
de agua que colocas junto a ella
tu vil estratagema nunca falla.
Abandona tus artes de piloto,
carroza, o llévame de copiloto.