20 marzo 2013

Påskekaffe



POR LAS NUBES


No me regalas nada, sino todo
lo contrario; tu pulpa, fruta rara,
me sale por un ojo de la cara
aunque los precios anden por el lodo.
El lecho donde yaces no es de gorra,
remunero tu ímpetu a mansalva
y de mi bancarrota no me salva
la impronta de tu cuño que se borra.
Desplumado me voy después del acto,
con una mano atrás y otra delante;
ni con poco ni mucho ni bastante
mi tinta da para sellar el pacto.
A todos cuantos gozan en tus brazos,
muerte, los exterminas a sablazos.