19 abril 2013

Enkel cortado



LA PARTIDA


Quien iba a mí a decirme que, querida,
tan frágil, tan discreta, tan callada,
irías a jugarme la pasada
de dejar mi camino sin salida
hacia ninguna parte. Compartida
huiste aprovechando mi bajada
para comprar tabaco. Todo o nada
había sido la apuesta en la partida
y todo se ha perdido. Tu maromo
te ha dado con la puerta en las narices
en pos de otros destinos. Cicatrices
que cerraron dejando adentro el plomo.
Ahora en la terraza mientras fumo
me queda de tu aliento solo el humo.