28 julio 2008

Americano

Lo bueno siempre se repite.


Quienes nunca invitan se acuerdan toda la vida de los que no les invitan.


sms1, 10:31: "Buenos días veraniegos, querido. Un abraaazo. Elisa."
sms2, 14:29: "Hello, sólo quería desearos buen viaje. Nosotros viajamos mañana. Pensaré en ti en tu hábitat natural. ¿Tomamos un café cuando vuelvas?, Elizabeth."
Raspuesta común: "Gracias, igualmente. Te invito un café aquí en A... cuando vuelva."


Las afinidades electivas son la versión literaria del intercambio de parejas.


Con las mujeres y los móviles hay que hablar sólo lo fundamental, el resto se puede hacer en persona.


El móvil es el alfa y la omega del matrimonio, con él empieza y con él termina.


Los cuernos son las antenas del móvil.


En política y en matrimonio a la larga siempre se suele eligir lo peor.


Para que funcione el matrimonio tiene que haber separación de bienes y de cama.


Cuando se atrofie la zona de Broca aumentará la capacidad del cerebro.


La memoria es un palimpsesto, excepto la de Funes.


En el matrimonio siempre te eligen bien y siempre eliges mal.


Fumar con un libro en la mano provoca cáncer de letra.


Las ostras producen lo mismo que la comida basura.


Muchos matrimonios tienen su climax en la boda y el resto es anticlimax.


El matrimonio debería venir con fecha de caducidad.


A la tierra corresponde la rueda, al aire la imprenta, al fuego el tren y al agua el ordenador.


A los deportistas que dedican sus victorias a los dioses deberían descalificarlos por doping.


Los que van a escuelas religiosas siempre quedan con secuelas.


Evitar sobre todo el contacto con un cura católico.


Hípica: Deporte donde el deporte lo hace otro.


Los instrumentos en el deporte son la prolongación de partes del cuerpo.


La pelota es el instinto de la muerte.


El ajedrez es el deporte de los dedos.


Me interesa la que no le importe que fume aunque no fumo.