22 agosto 2016

Ataraxía y alcionismo




DUPLICIDAD


Todo tu fuego incendia el aposento
desde que no te siento: la abertura
que destila en las yemas su textura,
la danza entrecortada de tu aliento
en la tórrida cúspide, el sediento
jinete que se ciñe a la montura,
los labios en la herida que supura,
la lengua que humedece el sedimento.
El zumo de la concha se derrama
gota a gota y arroya por la palma
en la noche sin luna, colma y calma 
la sed por el desierto de la cama.
Todo lo que me diste lo poseo
doblemente en memoria y en deseo.