MÁS ALLÁ DE LA MUERTE
Ahora que la vida me separa
de tus henos, ya fuera de mi mundo,
me drogo con tu aroma más profundo
y humedezco los surcos de tu cara.
Ahora que el destino nos depara
la inmensa eternidad en un segundo
me despierto en tus brazos y te inundo
al filo de la noche muda y clara.
Ahora que la fruta que madura
vierte su zumo cada madrugada
en otro paladar y mi armadura
se oxida en la cuneta desangrada,
espero que hechos polvo mi ceniza
se disuelva por siempre en tu ceniza.