MÉTODO DEL DISCURSO
Intercambio de ideas entre amigos
que se conocen y comparten
gustos, complicidades, experiencia,
ilusiones, sueños, emociones
a lo largo de la vida, que piensan
más o menos de la misma forma,
se comprenden cuando charlan,
contrastan puntos de vista,
respetan sus opiniones parecidas
o distintas y muestran empatía.
Partiendo de esta base los temas
se van desarrollando y complementando
con nuevos matices que surgen
naturalmente en favor del diálogo.
Hay que estar dispuestos a cambiar
si es necesario los puntos de vista propios,
saber escuchar y procurar ser coherentes
y claros en las argumentaciones,
fomentar los recursos expresivos,
de forma natural y apropiada al contexto,
emplear ejemplos, metáforas, humor,
evitar la ironía, el sarcasmo,
el exceso de negatividad
y estar siempre dispuestos a rectificar.
Es importante elegir bien la ocasión
y el lugar adecuados para entablar
conversación y que se desarrolle
de manera natural, no forzada,
por ejemplo durante una comida,
un paseo por el bosque o la ciudad,
después de ver una película,
de un concierto, de una exposición, etc...